Cuenta la historia que el día
del lanzamiento del auto, alguien preguntó a los representantes de GM por el
origen de la palabra “Camaro” y que estos respondieron que el Camaro era un
animalito que se alimentaba de Ford Mustang.
Lo bueno de las buenas batallas
es que obligan a cada uno de los contrincantes a dar lo mejor.
Para mí parte de lo mejor de
Chevrolet y Ford está representado en la historia de estos dos autos, pero eso
puede que sea sólo filia.
El Shelby GT 350 R 1965 fue
diseñado por Carol Sheby y nació con la intención de borrar al Corvette.
El Super Yenko 1968 fue
diseñado por Don Yenko y nació con la intención de borrar al Shelby.
Carroll Shelby fue un piloto norteamericano
que fue famoso, entre otros, por haber creado el Mustang Shelby.
Don Yenko fue un piloto norteamericano
que fue famoso, entre otros, por haber creado el Camaro Yenko.
Shelby ya había trabajado con
Ford en el Shelby Cobra.
Yenko era distribuidor de
Chevrolet y ya había modificado
Corvettes y Conveirs.
Para 1965 la Ford quería que el
exitoso auto que había creado para señoras y chicos el año anterior se codeara
con los autos rudos del momento.
Cuando la Chevrolet lanzó el
Camaro, Yenko empezó a soñar con el Super Yenko Camaro.
La Ford tenía otro objetivo en
la mira; un auto que le hiciera frente al Corvette.
En 1968, Yenko notó que el
motor del Corvette L72 encajaba perfecto en el compartimiento del motor del
Camaro y empezó a modificar los que llegaban a su cocesionario.
Shelby-American ya había
vencido Corvettes en los campeonatos de fabricantes norteamericanos con el
Shelby Cobra.
Los Camaros modificados de
Yenko fueron un éxito y el equipo no dio a basto en la producción.
Era apenas natural que
Shelby-American se encargara de la modificación del Mustang, si el objetivo era
vencer Corvettes.
A Yenko se le ocurrió acudir a
la Chevrolet y solicitar Camaros con motor de Corvette originales de fábrica,
pero la GM tenía políticas que impedían usar un motor tan potente en un auto
pequeño.
Se fabricaron dos versiones del
Shelby 350, uno de calle, que es ampliamente conocido, y uno de carreras.
Yenko finalmente convenció a la
GM para que se diera la producción de Super Yenkos con insignias y motores
originales de fábrica.
Greenlight y sus moldes limpios y bien terminados.
Johnny Lightning y en sus mejores tiempos, cuando cada modelo sorprendía.
En cuanto a potencia, el Camaro
supera de lejos al Shelby; sería más justo un enfrentamiento con el GT 500,
pero aquí la cuestión era de gusto del coleccionista (que siempre tendrá algo
de arbitrario) más que de potencia o justicia. Hasta la próxima.
nunca me gustó esa generación de camaros primerizos.
ResponderEliminary por el contrario, ese mustang es el que más me gusta.
la comparacion tiene resultado cantado, como tú dijite.
blanco es, la gallina lo pone,
me quedo con el mustang.
Otra vez concuerdo, me quedo con el Mustang...
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